
El alto precio del futbolista, por el que la UDA pagó ocho millones por el 50% de sus derechos, complica una salida a modo de traspaso definitivo.
La Unión Deportiva Almería tiene muchos asuntos que abordar en cuanto a planificación de la plantilla, pero en los despachos del Juegos del Mediterráneo establecen prioridades como decidir el futuro de Sergio Arribas, uno de los jugadores que más cartel tiene en el mercado, lo que se ha traducido en el interés de equipos como Mallorca y Alavés que ya han tanteado su incorporación.
Arribas, pese a haber completado una temporada bastante irregular, con periodos en el banquillo y fases de no disputar ningún minuto, ha acabado siendo el máximo goleador del equipo gracias a un arranque de campaña muy inspirado ante la portería contraria, con seis goles en las primeras jornadas, y una recta final en la que anotó en Son Moix e hizo un doblete frente al Cádiz.
La operación no es nada sencilla, ya que la UDA pagó más de siete millones de euros por el 50% de sus derechos y parece bastante complicado que los primeros pretendientes del jugador puedan llegar a esas cifras, descartando casi desde el inicio que se pueda conseguir una plusvalía. Esperar al mercado internacional parece la opción más interesante, aunque en esta operación siempre hay que tener en cuenta el visto bueno del Real Madrid.
El jugador, de momento, aguarda que pasen las semanas y el mercado termine de romper. Sus declaraciones a los medios oficiales en las que anunciaba la visita de su representante a los despachos del Juegos no gustaron en el club y desde entonces ha mantenido otro discurso, llegado a dejar abierta la puerta a jugar en Segunda.