Otra más, y van unas cuantas esta temporada. El equipo no dio la talla en Burgos y la verdad es que en el fondo quien más quien menos se lo esperaba. El partido del Zaragoza fue un espejismo, más que nada porque el rival está en descomposición y con un poco de empuje y muchos errores groseros del Zaragoza y una falta de actitud tremenda pues maquillas un resultado que nos hacía albergar algo de esperanzas en la visita a Burgos, pero el equipo volvió a la rutina, a ese equipo indolente, poco trabajado, sobre todo a mi lo que no me gusta es la actitud, veo que entre ellos no se hablan, no hay una cobertura cuando se va un oponente de cualquier jugador nadie guarda la posición del otro y claro, es muy fácil achacar el número de goles encajados a la defensa, pero es que en el centro del campo no pasa nada, no pasa nada hacia arriba, es decir, construye más bien poco, y hacia abajo es un desastre, es un erial, todo lo que pasa por el centro del campo del rival son ocasiones porque el partido no se sujeta. Así que otro partido de ‘chichinabo’ que nos va a situar donde estamos, en una mitad de la tabla que no sé si nos va a dar para meternos en el play off y el camino es un poco más largo, necesitas hacer cuatro partidos consistentes y el Almería no los ha tenido ni incluso cuando ha ganado. Veo una situación complicada, veremos a ver contra el líder esta semana si somos capaces de retomar la senda de la victoria.
