
Como en cada desplazamiento atractivo ya tenemos liada una buena polémica en la Unión Deportiva Almería, incapaz desde hace tiempo de ofrecer una mínima explicación de las causas por las que lo que debería ser una fiesta para los aficionados, viajar con su equipo, se acaba convirtiendo en un auténtico polvorín con enfados, acusaciones y sospechas de trato preferente.
El Granada CF envió a principios de semana 450 entradas a la UDA y aunque el club vino a apuntar que en 10 minutos ya se habían despachado, lo cierto es que fue en poco más de la mitad, vamos, un visto y no visto. A partir de ahí, mil y un comentarios de aficionados rojiblancos que intentaron comprar su localidad y se quedaron con las ganas con el pensamiento de que el club indálico en realidad puso bastantes menos a disposición de sus seguidores y ya había mandado un buen paquete extra a una de las peñas, ya saben, la de siempre, además de cumplir con otra serie de compromisos de los que los abonados ninguna culpa tienen.
Preguntaba esta semana al aire nuestro director, Víctor Hernández, qué ganaba el club cabreando a unos muchos para agradar a unos pocos, una historia que además se repite, ya que también García Gabarrón se rindió a la figura de la presunta presidenta de la Federación de Peñas y a su cada vez más reducido grupo de palmeros. Más allá de que a El Assy gusta en alguno de los pocos actos a los que acude en representación del club verse acompañado por la presunta presidenta y tratar de hacer ver que cuenta con el respaldo de quienes dicen ser representantes de la afición, coincido, es mucho castigo para tan poca chicha.
Y no quisiera esta semana marcharme sin dedicarle unas cariñosas palabras a la esposa de Fernando Martínez, Marta Abellán, que ha visto oportuno participar en nuestras redes sociales para recomendarnos que hagamos periodismo y no digamos mentiras. Con todo el respeto Marta, Marcador Almería es el único medio que está haciendo periodismo alrededor de la UDA pese a que el club que os hace un ingreso generoso a primeros de mes nos tiene vetados y vulnera la libertad de prensa y el derecho a la información, algo sobre lo que no se ha manifestado ningún componente de la plantilla, tampoco tu marido y capitán, que prefiere mirar para otro lado, incluso cuando personal del club agrede a un periodista en las propias instalaciones, ni mu Marta. De mentiras cuando quieras podemos hablar largo y tendido, pues este blog tiene sus limitaciones de espacio y tiempo, pero a lo mejor no somos nosotros los que saldríamos de tal conversación con la cara colorada, de hecho estoy convencido de ello. Un saludo afectuoso.