Pues sí señor: en mitad de la tormenta perfecta, en la semana del cambio de entrenador, del adiós de JIM y el hola qué tal a Sergi, en plena erupción volcánica en el Estadio de los Juegos Mediterráneos, llega el Nou Camp.
Claro que sí: sin complejos, con casi la mitad del equipo titular preservado en casa, con dos canteranos del filial en la expedición, técnico debutante y con apenas un par de días a las órdenes del ex lateral azulgrana, el Almería se planta ante el líder de la liga.
A ver qué pasa.
¿Os imagináis por un momento que el partido no se saldara con victoria local? ¿Qué pasaría incluso si el Almería se lleva la victoria de tierras catalanas?
En realidad, la cosa no sería tan grave para el Barça. De hecho, seguiría siendo líder y tendría un punto más el golaveraje sobre el Real Madrid. Además, eso ya lo hicieron antes el Málaga y el Celta y tampoco dimitió el presidente de la Generalitat.
Pensándolo bien, Barcelona le debe mucho a Almería. Para empezar, la gran mayoría de las hortalizas que comen allí son nuestras y por ahora no les hemos mandado nada en mal estado, a pesar de las pulmonías que dice ese arlequín de poca monta que se hace llamar Chicote y cuyo único mérito conocido es insultar a los invitados a su cutre-programa de televisión.
Pero hay más. Cuando Cataluña necesitaba mano de obra para levantar su industria, ¿quiénes estaban allí los primeros arrimando el hombro? Sí señor, los almerienses éramos.
Incluso si hablamos de radio, ya les mandamos para allá, cuando la radio barcelonesa no había aún aprendido a ser la referencia de este medio en nuestro país, les mandamos a nuestro Carlos Herrera, Encarna Sánchez, Andrés Caparrós y compañía. Y que se sepa nadie nos lo ha agradecido.
En fin, motivos no les faltan, a nuestros amigos blaugranas, para echarnos una mano, prima, esta noche, que los tres puntos que hay en juego son mucho más importantes para nosotros que para ellos.
Y si no es así, si no cunde la generosidad y la devolución de los favores atrasados, tranquilos: siempre nos quedará Granada.
