
Los rojiblancos enfrentan sesiones intensivas de entrenamiento físico y táctico bajo el calor veraniego.
La UD Almería ha culminado su primera semana de pretemporada con una intensidad notable y un esfuerzo físico exigente para los jugadores. La carga de trabajo ha sido considerable, y el equipo ha enfrentado jornadas muy duras bajo el sofocante calor veraniego. A pesar de las dificultades, la actitud del equipo ha sido ejemplar, mostrando una fuerte determinación para sentar las bases de una gran temporada.
Este viernes, los rojiblancos tuvieron una doble jornada de entrenamiento. Por la mañana, se centraron en ejercicios físicos durante dos largas horas, con circuitos diseñados para mejorar la fuerza y la resistencia. El Anexo del estadio se transformó prácticamente en un gran gimnasio, donde los jugadores trabajaron a un ritmo elevado. Por la tarde, la sesión se enfocó más en el balón y en aspectos tácticos del fútbol, preparando al equipo para los retos que se avecinan.
El sábado, el Almería continuará con un entrenamiento a puerta cerrada en la mañana, para luego disfrutar de un merecido día de descanso el domingo. Sin embargo, la pausa será breve, ya que el lunes retomarán la actividad con una nueva doble sesión. Con cuatro semanas más de pretemporada por delante, el equipo se prepara con diligencia y esfuerzo para el inicio del campeonato.
La planificación de esta primera semana demuestra el compromiso del cuerpo técnico y de los jugadores para alcanzar un alto nivel de rendimiento. La mezcla de trabajo físico riguroso y práctica táctica es fundamental para enfrentar los desafíos de la próxima temporada con éxito.