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RADIOBLOG MINUTO 92, por Víctor J. Hernández Bru.
Así es como se llama. Valentin James Ozornwafor, uno de los futbolista que debutaron ayer con la UD Almería. No jugó muchos minutos, pero lo hizo en un momento clave, en el que el Deportivo estaba cercando al equipo de Pedro Emanuel y además por lesión de un compañero.
Mala tesitura para debutar, pero el joven nigeriano solventó la papeleta con sorprendente solvencia, a pesar de que a casi todos nos habían llegado comentarios de que estaba tremendamente verde para la Segunda División y de que incluso su entrenador dijera de él que aún estaba lejos de que llegara su momento.
Es más, Pedro Emanuel ha llegado a dejarlo sin vestir a pesar de formar parte del cuarteto de centrales en un equipo en el que uno de los otros tres está lesionado; dicho de otra manera, Emanuel había preferido afrontar varios partidos sin centrales en el banquillo antes de contar con él.
Entiendo por evidente que todo esto suma mérito a su comportamiento de ayer, sin notar en absoluto ni su juventud ni su falta de experiencia en la categoría, haciendo valer su rapidez, su potencial físico y su tremenda envergadura. No diré, de momento, que sea Beckembauer, pero creo que ha quedado evidente que es incluso mucho más que un buen cuarto central para la categoría.
Bastante menos demostró Arvin Apiahh, lo cual no quiere decir mucho, puesto que lo normal es que un futbolista, tan joven como el otro, que debuta y que además sale de una lesión, lo normal es que le cueste coger el tono y le ritmo de partidos.
Yo confío en que Appiah va a ser un futbolista importante, no sé si para justificar su condición de fichaje más caro en la historia del club, cuestión ésta que seguro que no le va a hacer ningún bien, pero sí al menos para ayudar de manera decisiva a la tarea colectiva.
Dicho esto, al margen de que no entiendo la ausencia de Panadero ayer en la convocatoria, como no entendí su cambio en El Molinón. A no ser que haya pasado algo con él, lo cual desconozco, creo que fue de lo poco que se movió a cierto nivel en Gijón el jueves.
En todo caso, ayer el Almería pareció empezar de cero, tratando de asentar conceptos básicos que parecían superados con el paso de los partidos, pero que habían desaparecido como por arte de magia en los tres anteriores envites.
No cabe duda de que el técnico luso tiene tarea, pero mucha, para introducir a los nuevos futbolistas que, obviamente, para él deben ser titularísimos.
